Y el infierno envió a un ángel...
“La gente creyó alguna vez, que cuando alguien moría, un cuervo llevaba su alma a la tierra de los muertos; pero algo tan malo sucedía, que se llevaban una gran tristeza con ellos y el alma no podía descansar, entonces algunas veces, sólo algunas veces, el cuervo trae de vuelta aquellas almas para rectificar las cosas.”
30 de Octubre, la Noche del Diablo... víspera de las sombras de Halloween... ¿Qué sucede cuando la vida se nos es arrancada bestialmente de las manos? Por lo pronto no tenemos más remedio que invocar a la Justicia de donde sea y por el medio que fuere. Ante tal perspectiva, la mejor opción es traer a algún ser de ultratumba: un No-Vivo, alguien que traiga consigo sed de justicia y de venganza, alguien que se encargue de poner las cosas en el lugar correcto, alguien que no se preocupará por la Muerte, puesto que ya está muerto... Una ciudad en la que casi siempre es de noche, copiosas e incesantes lluvias que dan un toque triste y melancólico a la decadente atmósfera de la urbe, grandes puntos de luz que penetran en el interior de las habitaciones, manejo de retratos como enlace directo con el pasado... Color negro constante que nace prácticamente en todos los lugares y situaciones, arquitectura gótica, criaturas de la noche que recurren a la máscara y al disfraz para provocar miedo a sus contrincantes... o víctimas. La ciudad es un hervidero de pecado y lujuria, una visión exagerada y retorcida del paisaje que todos podemos apreciar en el diario vivir de una urbe en la cual las personas son atrapadas en la neurosis que nos impone el sistema. De tal escenario surgen Eric Draven y Shelly, una romántica excepción a esta fatídica norma, pues representan el último bastión de amor y esperanza ante la intromisión del mundo decadente y oscuro que les rodea. Su negativa a abandonar todo lo que esto significa, su hogar, el lugar de sus sueños, les vale quedar a merced de fuerzas que están en contra de sus ideales y cuya fuerza en esta ciudad es irresistible. Eric no sólo es asesinado, sino que en preámbulo a su muerte ve cómo la maldad del hombre corrompe y destruye todo lo que amó en vida, y es en el final de su vida donde subyace el anhelo de aniquilar a aquellos que tomaron lo que él poseía. El mundo que se abre ante nuestros ojos es un grito desgarrador que pide su redención... la oscuridad que el Cuervo trave entre sus alas es el tope del abismo, el guía espiritual que enlaza el Mundo de los Vivos con el Reino de los Muertos... tras él viene la redención. "Desesperado y gris, fuerte como el acero pero muerto en su interior, el Cuervo ríe bajo una farola. Una sonrisa vudú de alguien que vivió, murió y aún está vivo... camina hacia su casa, donde puede perder su sombra en la oscuridad y pintar su rostro con los colores de la alegría. Esta noche el infierno envía a un ángel..." Un alma clamando por la justicia, una noche preparada para la venganza.
Ángeles y gárgolas contemplarán cual silentes e impávidos testigos las postraciones y combates de los protagonistas, en que se jugarán su propia vida y la de otros, para vivir o morir de manera definitiva. A pesar de todo, Eric anhela encontrar algo: tal vez encontrar la paz, tal vez encontrar la justicia, tal vez encontrar el amor perdido, tal vez todo lo anterior, para finalmente lograr descansar en paz: "Desconcertado estaba el diablo y sintió el horror de su bondad oculta.” Obra maestra, hipnotizantes imágenes cimentadas en majestuosos decorados creando un ambiente oscuro y gótico de una ciudad dominada por la violecia, la idea de un vengador que retorna de la muerte, un ángel sombrío que vuelve para poner orden... como hacían los poetas malditos de la talla de Baudelaire o Rimbaud... aparecidos o espectros... mensajeros del más allá que versan en los relatos de mi idolatrado Edgar Allan Poe. Reverberación de los síntomas de nuestro tiempo, símbolo de la destrucción de lo sagrado, la violación de lo amado, la solución a estos flagelos... Un amor tan puro no puede tener obstáculos que lo detengan, ni siquiera la misma Muerte... Porque la Vida sigue unida a la Muerte, he aquí una manifestación de la aparición de un alma atormentada con sed de justicia.
30 de Octubre... En esta intempestiva víspera de Halloween, los Diablos salen a deambular. Cuidaos de no encontraros a vosotros mismos...